Pués en un Cortijo cerca de mi pueblo Limones, ocurrió una cosa muy parecida pero no fué un gato, fué un pavo. Habia una moza de muy buén ver y un poco alegre en la cosa de amorios, una noche en el Bar calentaron y animaron a uno para que fuera al Cortijo a pedirle algún favor a la moza, y al dia siguiente sí que fué, llegó al Cortijo tocó en el porton pero no salía nadie, insistió varias veces y viendo que no salia nadie, se le ocurrio meter el pito por un agujero que el porton tenía supongo que para incitar a la moza si estaba dentro, pero lo que habian dentro eran varios pavos y uno de ellos al ver aquello colorao creería que sería una fresa u otra fruta y zás picotazo como el que le pegó, este sí que bajó todos los Santos del cielo, cayó de espaldas y creo que chillaba como una rata. ¡Ay! Tontorron.