Tener hoy en dia una habitación como esta, es todo un lujo; bueno en la época medieval la "intimidad" no existía las casas carecían de espacios diferenciados, por lo que ni el dormitorio era un lugar privado.
Solian dormir desnudos para airearse de los piojos y las pulgas que tanto les molestaban durante el dia y, para ahorrar espacio y aumentar la temperatura, todos los habitantes de la casa se echaban en la misma cama.
Saludos.
Solian dormir desnudos para airearse de los piojos y las pulgas que tanto les molestaban durante el dia y, para ahorrar espacio y aumentar la temperatura, todos los habitantes de la casa se echaban en la misma cama.
Saludos.
No te creas que los de antes tenían camas tan lucidas, ni "alcobas" de tanto boato.
Según me han contado, las camas antes eran de banquillos (cuatro tablas), y los colchones en realidad eran jergones de paja, que al final de verano renovaban después de la siega y trilla del centeno.
Yo me acuerdo (y esos ya eran más modernos), de los colchones de lana de la casa de mi abuela (aún se conservan), hacían unos nudos que hasta que encontrabas la postura..., y debían ser del plan Marshall, porque recuerdo ver en alguno la bandera de los Estados Unidos.
Tamnbién me puedo imaginar, la cara de cierto pastor vegato, cuando se casó y vió la cama de matrimonio, al parecer todo se le iba en decir ¡Madre, que colcha...!, ¡tú verás...!, ¡acostumbrado como estaría a dormir en el suelo la mayoría de los días...
Un saludo afectuoso
Según me han contado, las camas antes eran de banquillos (cuatro tablas), y los colchones en realidad eran jergones de paja, que al final de verano renovaban después de la siega y trilla del centeno.
Yo me acuerdo (y esos ya eran más modernos), de los colchones de lana de la casa de mi abuela (aún se conservan), hacían unos nudos que hasta que encontrabas la postura..., y debían ser del plan Marshall, porque recuerdo ver en alguno la bandera de los Estados Unidos.
Tamnbién me puedo imaginar, la cara de cierto pastor vegato, cuando se casó y vió la cama de matrimonio, al parecer todo se le iba en decir ¡Madre, que colcha...!, ¡tú verás...!, ¡acostumbrado como estaría a dormir en el suelo la mayoría de los días...
Un saludo afectuoso