En Mayo de 1895, la prensa anuncia que tras el descubrimiento el año anterior de un manantial por el Ayudante de Obras Públicas, jefe de la división de ferrocarriles, José Zurbano de la Red, a 4km de Ávila y hecho el correspondiente análisis se hace constar que las aguas son excelentes para el tratamiento de enfermedades del aparato respiratorio, del estómago y de la vejiga. Se está construyendo un restaurant y una casa próxima a la fuente. El 9 de mayo de 1896 se informa de la inauguración del establecimiento de aguas medicinales.
A principios de Agosto, los Sres. Zurbano y Aranbuena invitan a varios periodistas, un médico, un editor y el sobrino del Sr. Sagasta (que no pudo asistir por estar enferma su mujer) a visitar el nuevo balneario que se había inaugurado oficialmente el día 3. Uno de los periodista invitados, Julio de Vargas de El liberal, una vez de vuelta en Ávila pasó a saludar al Sr. Sagasta.
Pablo Montejo
A principios de Agosto, los Sres. Zurbano y Aranbuena invitan a varios periodistas, un médico, un editor y el sobrino del Sr. Sagasta (que no pudo asistir por estar enferma su mujer) a visitar el nuevo balneario que se había inaugurado oficialmente el día 3. Uno de los periodista invitados, Julio de Vargas de El liberal, una vez de vuelta en Ávila pasó a saludar al Sr. Sagasta.
Pablo Montejo