¿Por qué sigue siendo Urraca Miguel, coto redondo, y estamos los propietarios como en la época feudal, donde los señores nobles y caballeros tenían el poder de decidir sobre las tierras, las personas , animales y demás?. Ya es hora de que la Junta de Castilla-León, haga suyo el problema y se digne de una vez por todas en registrar de oficio las propiedades de carácter urbano, como se hizo con las fincas rústicas, sin necesidad de tener que hacerlo a través de un abogado y un procurador que cuesta su dinero a los habitantes de Urraca. Es de vergüenza esta situación que afecta no sólo a Urraca, sino a otros pueblos colindantes.