Que estas flores que he intentado que salieran en primer plano sirvan como testimonio de agradecimiento para el pueblo que durante tantos años nos acogió, tanto a mi como a toda mi familia, e hizo que nunca nos sintiésemos forasteros. En esta casa vivimos, yo incluso nací en ella, y en esta casa, hoy Ayuntamiento, aprendimos lo que era solidaridad y cariño. Gracias VILLANUEVA, mi padre y todos nosotros nunca os olvidaremos.