Esta bonita plaza y lo que representa su nombre: Lo debemos a la Alcaldesa
Carmen Hernandez por su buena gestión al frente del Ayuntamiento.
LA MATANZA DE ATOCHA DEL 11. M. DE 2004
POESIA
El tren madrugador de la muerte;
Un día turbio, una mañana gris, triste y parda
un tren rojo con brazaletes blancos;
Rojo como la sangre derramada,
blanco cómo la inocencia.
Unas serpientes venenosas traídas de tierras lejanas
su potente veneno inmovilizó el tren.
¡Humo, humo de luto negro que huele a incienso,
carne picada que vuela al cielo!
De tanta pena tanta tristeza,
brota la lluvia en llanto.
Más de 190 cuerpos sin vida
192 casas sin flores en sus ventanas
192 familias sin velas en sus casas
192 besos menos cada día
192 despedidas perdidas todas las mañanas.
Cientos de heridos sufren las penas.
miran tristes tras su ventana.
Como sonámbulos gritan; ¡solo hemos hecho
el crimen de vivir y salir adelante!
Terroristas habéis matado los cuerpos,
habéis segado las vidas.
¡No podéis matar las almas!
¡Oh Señor diles que el alma vive
cuando el cuerpo muere!
Habéis quemado vuestras almas,
negras tan negras como la muerte.
El que desprecia la vida de los demás
no merece conservar la suya.
Las estrellas sonrojadas de vergüenza
se escondieron al ver tanta crudeza,
a la mañana siguiente llovió y lloro todo el día el cielo,
11 millones de paraguas protestaron con crespones negros,
salieron a la calle exclamando su dolor al cielo.
Puedo escribir los versos más tristes de mi vida;
una tristeza como una pesadilla, gira y vuelve a girar.
Paso las imágenes y vuelvo a pasar y no me gustan.
Y son tan largas las noches que me asomó
a la ventana haber amanecer,
me paso el día triste y llorando;
mis lágrimas como fuentes hacen nubes
y vuelve a anochecer.
Solo triste perdido y como ausente,
vuelvo de nuevo a lamentarme a solas.
Puedo escribir los versos más tristes de mi vida;
¡Adiós amigos mis seres queridos!
Adiós ¡Adiós ¡Hasta siempre amigos.
Autor Fausto Díaz Sánchez
Basado en la realidad.
Carmen Hernandez por su buena gestión al frente del Ayuntamiento.
LA MATANZA DE ATOCHA DEL 11. M. DE 2004
POESIA
El tren madrugador de la muerte;
Un día turbio, una mañana gris, triste y parda
un tren rojo con brazaletes blancos;
Rojo como la sangre derramada,
blanco cómo la inocencia.
Unas serpientes venenosas traídas de tierras lejanas
su potente veneno inmovilizó el tren.
¡Humo, humo de luto negro que huele a incienso,
carne picada que vuela al cielo!
De tanta pena tanta tristeza,
brota la lluvia en llanto.
Más de 190 cuerpos sin vida
192 casas sin flores en sus ventanas
192 familias sin velas en sus casas
192 besos menos cada día
192 despedidas perdidas todas las mañanas.
Cientos de heridos sufren las penas.
miran tristes tras su ventana.
Como sonámbulos gritan; ¡solo hemos hecho
el crimen de vivir y salir adelante!
Terroristas habéis matado los cuerpos,
habéis segado las vidas.
¡No podéis matar las almas!
¡Oh Señor diles que el alma vive
cuando el cuerpo muere!
Habéis quemado vuestras almas,
negras tan negras como la muerte.
El que desprecia la vida de los demás
no merece conservar la suya.
Las estrellas sonrojadas de vergüenza
se escondieron al ver tanta crudeza,
a la mañana siguiente llovió y lloro todo el día el cielo,
11 millones de paraguas protestaron con crespones negros,
salieron a la calle exclamando su dolor al cielo.
Puedo escribir los versos más tristes de mi vida;
una tristeza como una pesadilla, gira y vuelve a girar.
Paso las imágenes y vuelvo a pasar y no me gustan.
Y son tan largas las noches que me asomó
a la ventana haber amanecer,
me paso el día triste y llorando;
mis lágrimas como fuentes hacen nubes
y vuelve a anochecer.
Solo triste perdido y como ausente,
vuelvo de nuevo a lamentarme a solas.
Puedo escribir los versos más tristes de mi vida;
¡Adiós amigos mis seres queridos!
Adiós ¡Adiós ¡Hasta siempre amigos.
Autor Fausto Díaz Sánchez
Basado en la realidad.