A SANTA MARINA MATIR
Está poesía es mi ilusión
sube al cielo y dile a cristo,
que como yo no soy listo
me ayude en mi decisión.
Gentes que en este pueblo vivían
hace cientos de años te recibían,
hoy nosotros los que estamos
con esta capa roja te tapamos.
Santa milagrosa vengo a pedirte ayuda
mi garganta se me seca y se me anuda
me duele el corazón y se nubla la vista,
pido a Dios que me asista
en está ocasión tan ruda.
Al empezar a caminar
miro al horizonte con desesperación,
atentamente busco, busco; se me escapa
el tiempo sin encontrar el lugar.
Cansados de llorar tengo los ojos
nada vale las lágrimas vertidas,
te pedimos descansar bajo el manto
de vuestra protección y amparo
SANTA MARINA
Llego llorando a tus pies
con los míos cansados,
traigo conmigo mis defectos,
virtudes, esperanzas y sueños.
Tu herida vela del alma
navega rosa del viento,
destellos de fina plata
son gozos de sentimiento.
Perfume de tomillares,
caricia de terciopelo,
sonata de sensaciones
despertar viejos encinares.
Santa Marina
La paz de tu mirada me da
confianza y esperanza.
TE PEDIMOS SANTA MARINA
Que nos des de beber de tus tres fuentes
para sanar las heridas de tantas gentes,
tú sangre derramada no fue en vano
bajo tu capa nos proteges a los cristianos.
Ayúdame, hay gente que me necesita,
ayúdanos cuando mueran nuestros cuerpos,
con los vuelos de tu capa de palmas
que vuele al cielo nuestras almas.
Está poesía es mi ilusión
sube al cielo y dile a cristo,
que como yo no soy listo
me ayude en mi decisión.
Gentes que en este pueblo vivían
hace cientos de años te recibían,
hoy nosotros los que estamos
con esta capa roja te tapamos.
Santa milagrosa vengo a pedirte ayuda
mi garganta se me seca y se me anuda
me duele el corazón y se nubla la vista,
pido a Dios que me asista
en está ocasión tan ruda.
Al empezar a caminar
miro al horizonte con desesperación,
atentamente busco, busco; se me escapa
el tiempo sin encontrar el lugar.
Cansados de llorar tengo los ojos
nada vale las lágrimas vertidas,
te pedimos descansar bajo el manto
de vuestra protección y amparo
SANTA MARINA
Llego llorando a tus pies
con los míos cansados,
traigo conmigo mis defectos,
virtudes, esperanzas y sueños.
Tu herida vela del alma
navega rosa del viento,
destellos de fina plata
son gozos de sentimiento.
Perfume de tomillares,
caricia de terciopelo,
sonata de sensaciones
despertar viejos encinares.
Santa Marina
La paz de tu mirada me da
confianza y esperanza.
TE PEDIMOS SANTA MARINA
Que nos des de beber de tus tres fuentes
para sanar las heridas de tantas gentes,
tú sangre derramada no fue en vano
bajo tu capa nos proteges a los cristianos.
Ayúdame, hay gente que me necesita,
ayúdanos cuando mueran nuestros cuerpos,
con los vuelos de tu capa de palmas
que vuele al cielo nuestras almas.