Este plano de
Aranda de Duero de 1503 está considerado como el plano urbano más antiguo de
España. Además, está cartografiado en perspectiva tan solo un año después de que Leonardo da Vinci dibujara por vez primera el plano iconográfico de Imola.
El plano acompañaba un expediente enviado por el corregidor de la villa a los Reyes Católicos, por ser Aranda villa realenga, con la propuesta de tirar unas viviendas, representadas en rojo en el
mapa, que impedían el acceso a la
iglesia de
Santa María desde la
calle Barrionuevo.