La
iglesia parroquial de la población está bajo la advocación de
Santa Eulalia y empezó a construirse entre finales del siglo XV y principios del siglo XVI. Destaca su
portada renacentista. Además en su ámbito se encuentra la
Ermita de
Pinarejos, construida en el siglo XVII.
La iglesia parroquial, dedicada a Santa Eulalia de Mérida, situada en lo más alto, dominando el
pueblo, es renacentista, de una nave abovedada. Su
ábside es rectangular, añadido. Y la
torre es cuadrada, rústica con tres huecos y dos
campanas. Tiene una preciosa portada renacentista con
arco de medio punto con pilastrones repujados, friso y remate de hachones y leones en relieve, cobijada bajo alto arco también abovedado
La
pila bautismal es renacentista con gran copa acanalada; y el
retablo mayor es churrigueresco, llamativamente dorado. Tiene buenas imágenes y pinturas, destacando un
Cristo gótico, con brazo desclavado, y un relieve gótico de la
Virgen y
San Juan. Es de resaltar su hermoso y cuidado
órgano del XIX, restaurado en 1985.
Sus libros parroquiales dan comienzo en 1589.
Cuenta además en su territorio con las
ermitas de Nuestra Señora de la Salud, San Vicente (en lo alto de un cerro) y Nuestra Señora de Pinarejos, a cierta distancia.
En noviembre de 1941 nace Mariano Benito Andrés, Doctor en Bellas Artes y Catedrático; labor que compagina con su vocación de pintor, premiado.
Hay restos de una villa
romana (del entorno de Clunia) de los siglos IV-V y un
puente en el
camino de la ermita de la Virgen de Castro, probablemente Tardorromano