Por Pedro Lozano Huerta
Su iglesia, dedicada a San Pedro, apóstol, es renacentista, de tres naves y cabecera, con bóvedas de estrella. Su ábside es rectangular con contrafuertes en esquinas. la portada es renacentista con arco de medio punto con impostas, cuatro pilastras, friso, tres hornacinas con imágenes y frontón clásico, rematada en bolas y cruz, atribuida a Juan de Solares. Y la torre es cuadrada, amplia y airosa, de dos cuerpos con 16 huecos dos campanas y dos
campanillos, rematada en pináculos.
La pila es avenerada, sencilla y el retablo mayor es barroco, de Policarpo de Nestosa y Juan Galerón, con buena imagen de San Pedro.
Hay una Virgen sedente y un Crucificado del siglo XVI.
Sus libros parroquiales comienzan en 1566 y hay uno de una cofradía de 1407.
Hay cerca del puente una ermita, dedicada a San Juan Bautista, visigótica, rectangular, con canes sencillos, con arco mozárabe del siglo X y portada en herradura y con rasgos de arquitectura condal.
Queda la iglesia de un antiguo convento renacentista de dominicos con un retablo de Domingo de Vallejo y Juan Gandía y varias casonas blasonadas, entre las que destaca un palacio edificado en el siglo XV.
Tiene una ermita, compartida con Ahedo y la Revilla, denominada del Amparo.
Ante la iglesia, dentro del atrio, hay un sencillo crucero y fuera del atrio, en la plaza, hay un magnífico rollo jurisdiccional, de 1759, sobre cuatro escalones cuadrangulares.
Hay también un curioso Vía-Crucis de piedra- catorce cruces-, que, partiendo del centro del pueblo, salen de él siguiendo la carretera que conduce a Vizcainos de la Sierra.
Es la patria de uno de los héroes de la resistencia en Cascorro (Guerra de Cuba) el 3 de septiembre de 1896, Ruperto Martín.
En 1924 nace Vicente-Ángel Sebastián García, ingeniero técnico forestal, teniente de alcalde del Ayuntamiento de Burgos, encargado de Parques y Jardines, escritor.
En 1933 viene a la vida Carlos Bueno Heras, maestro, licenciado en Pedagogía, escritor.
El romance hace vivir en este lugar los odios de doña lambra contra sus sobrinos, los siete infantes de lara.
En sus tierras están catalogados un yacimiento arqueológico del Neolítico, otro de la Cultura Campaniforme, uno Romano (estela, calzada y puente) y dos Medievales. Y, además, dos posibles del Neolítico, tres del Calcolítico, uno de la
Edad del Hierro, uno Visigodo y siete Medievales60.
Es digno de tener en cuenta el legado de su folklore, como lo demuestran las danzas “del Reinado” y “la Campiña” y las sugestivas “lambradas”