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Hoy vamos a hablar del enemigo número 1 de el Tozo.
El escarabajo de la patata.
Es curioso el origen de este pequeño escarabajo. Se le llama también Dorífora del Colorado, porque fue en las Montañas Rocosas de ese Estado cuando se le descubrió hacia 1824 en una solanácea silvestre. De aquí se extendió a los cultivos de patata en la época en que se construía el ferrocarril del Pacífico, hacia 1850, y en 1865 se aplico sobre las plagas de este escarabajo el primer insecticida químico de la historia. Durante la primera guerra mundial invadió gran parte de Francia y Alemania, extendiéndose con facilidad por España, hasta llegar a el Tozo, siendo en el siglo XX uno de los parásitos más perseguidos.
El escarabajo de la patata.
Es curioso el origen de este pequeño escarabajo. Se le llama también Dorífora del Colorado, porque fue en las Montañas Rocosas de ese Estado cuando se le descubrió hacia 1824 en una solanácea silvestre. De aquí se extendió a los cultivos de patata en la época en que se construía el ferrocarril del Pacífico, hacia 1850, y en 1865 se aplico sobre las plagas de este escarabajo el primer insecticida químico de la historia. Durante la primera guerra mundial invadió gran parte de Francia y Alemania, extendiéndose con facilidad por España, hasta llegar a el Tozo, siendo en el siglo XX uno de los parásitos más perseguidos.
¿Tanto "caminan" los escarabajos, y de manera tan certera, que se vengan desde Francia a Las Loras, un pequeño rincón del Norte de Castilla?. Esto parece un poco raro ¿NO?. A ver si conocemos algo que nos dé pistas: por los años cuarenta, al poco de hacer extensivo este cultivo, dicen diversas gentes de esta comarca (recogido también en un libro colectivo sobre La Lora, que unas extrañas avionetas llegaban, volaban bajas y se marchaban sin más. He leído que en la zona de Úrbel -no recuerdo el libro- aquí llegaban gente en coches, se acercaban a las tierras de patatas con maletines y se iban. Mi difunto padre y otras personas de Hoyos en diversas ocasiones dijeron que vinieron avionetas en esas épocas que volaban por la lora de Sargentes.
La agroquímica alemana -y quizás de otros países como Bélgica- vieron, sin duda, una nueva y suculenta fuente de negocios. Es muy difícil investigar estos hechos por razones obvias aunque existen, como los apuntados y otros que convendría recabar, importantes indicios de que al mismo tiempo que los sencillos agricultores sembraban pàtatas otros más ávidos sembraban otros seres.
Las consecuencias ya las conocemos: el triunfo de la más perniciosa y perversa agroquímica a costa del paisaje, los seres animados incluidos el ser humano, la destrucción de la vida de las corrientes de agua, etc.
El gran problema de este fenómeno es lo que parece ser su inevitable irreversibilidad. La verdad es que la ciencia moderna pone de manifiesto, cuando se quiere, que hay pocas cosas irreversibles; pero me temo que lo del escarabajo vaya para muy largo plazo.
Es la lógica del capital más brutal.
La agroquímica alemana -y quizás de otros países como Bélgica- vieron, sin duda, una nueva y suculenta fuente de negocios. Es muy difícil investigar estos hechos por razones obvias aunque existen, como los apuntados y otros que convendría recabar, importantes indicios de que al mismo tiempo que los sencillos agricultores sembraban pàtatas otros más ávidos sembraban otros seres.
Las consecuencias ya las conocemos: el triunfo de la más perniciosa y perversa agroquímica a costa del paisaje, los seres animados incluidos el ser humano, la destrucción de la vida de las corrientes de agua, etc.
El gran problema de este fenómeno es lo que parece ser su inevitable irreversibilidad. La verdad es que la ciencia moderna pone de manifiesto, cuando se quiere, que hay pocas cosas irreversibles; pero me temo que lo del escarabajo vaya para muy largo plazo.
Es la lógica del capital más brutal.