El origen de
Belorado es Celta, probablemente autrigón, como demuestra la
arqueología y epigrafia (estelas, teselas hospitales, monedas), aunque se configura como villa en la Edad Media siendo frontera entre Castilla y
Navarra. Era el paso natural del
Valle del Ebro a la Meseta y para controlarlo se construyó, a comienzos de la Reconquista, el
Castillo sobre un cerro a cuyo pie se transladó la población que tuvo su origen al otro lado del
río en época
romana. Las
calles del
casco antiguo, estrechas y tortuosas, con típicos
pasadizos denotan la numerosa población que habitó dentro de sus
murallas. Fue
plaza fuerte del Cid, como dote de Fernando (primer rey castellano), al casarse con Jimena. Hoy del castillo apenas queda un murallón terroso desde el que se divisa una bella panorámica. El apogeo económico de Belorado fue temprano como cruce de
caminos entre el valle agrícola y la
sierra ganadera, entre reinos distintos que favorecían a la villa para atraerla. En el siglo X, el primer conde castellano independiente, como agradecimiento a que en Belorado le libraron de los hierros con que le tenían preso el Rey de Navarra (como dice el poema de Fernán González), concedió a la villa el privilegio de celebrar
mercado los lunes
costumbre que anima todavía la Plaza Mayor porticada. En 116, Alfonso I el Batallador (rey navarro-aragonés), le concedió el fuero y entre los privilegios que recoge, le permite celebrar una
feria que es la más antigua documentada en la
historia de
España; para entonces ya era importante la
Judería al pie del Castillo cuyo
Barrio "El Corro" conserva un aire pintoresco.
Su desarrollo fue en aumento y a principios del siglo XIII, en el reinado de Alfonso VIII, por privilegio real pudo el Concejo de la Villa usar sello que legitimara sus documentos. Su apogeo previció a lo largo del siglo XIII ptenciada especialmente por Alfonso X el Sabio que en sus estancias en la Villa le hizo importantes donaciones. Pedro l el Cruel agradeció a los moradorees de la villa, su apoyo en la guerra pero tras su muerte la nueva dinastía castigó a la villa que perdió su carácter realengo y especialmente a la judería a quien fue gravando con impuestos y trabajos cada vez más humillantes provocando su diáspora a la decadencia de Belorado. Los Reyes Católicos son su decreto de expulsión acabaron por arruinarla. No obstante quedaron adineradas
familias de conversos pues aquí nació Simón Ruiz, banquero de Felipe II. Si los Reyes potenciaron la villa en la Edad Media, en la Edad Moderna, Belorado perteneció al Señorío de los Condestabless de Castilla contando con importantes familias nobiliarias que destacaron en expediciones a América, en las letras (beliforano fue el preceptor de las hijas de Felipe II), y en las ciencias (Hipólito Ruiz dirigío en el siglo XVIII una expedición científica para estudiar la
flora americana).
BELORADO: v. con ayunt. y cab. del part. jud. de su nombre, en la prov., dióc., aud. terr. y c. g. de
Burgos (8 leg.) SITUACIÓN Y CLIMA. Se halla a la márg. izq. del r. Tirón, entre las cuestas del Castillo y de
San Francisco, y en paraje ameno y pintoresco por el mucho arbolado de elevados y copudos chopo, que se ven a sus alrededores: combátenla principalmente los vientos del N. y E., y como su temperatura es bastante fría y húmeda, se padecen por lo regular reumas y constipados.
TÉRMINO. Confina por N. con el de
Loranquillo, por E. con
San Miguel de Pedroso, por S. con
Villambistia y
Tosantos y por O. con
Quintanilla del Monte en Rioja: comprende el mencionado barrio de San Miguel de Pedroso, la granja titulada del Fresno, Horran de Contreras,
Huerta de Zarraga, un
edificio que llaman de Linares, y muchos manantiales de esquisitas
aguas: también se encuentran en su térm., en el
campo destinado para la
trilla de las mieses, varios
pajares que sirven para encerrar todas las
noches los
aperos y herramientas de los labradores.
POBLACIÓN. 452 vec. 1,807 alm.: CAP. PROD. 7.128,700 rs.: IMP. 706,590: CONTR. 89,562 rs., 12 mrs.
* Diccionario Geográfico Estadístico Histórico de España. Pascual Madoz, 1848.