El edificio del Teatro Principal, albergaba unos salones que fueron utilizados por el “Salón de Recreo”, sociedad recreativa de la burguesía local.
Esta sociedad, fundada en 1858, llegó a ocupar la mayor parte de los lujosos salones y salas de juego del edificio.

SALA DE JUEGOS y BAR

Eduardo de Bessón fue uno de los grandes impulsores de la Sociedad de Recreo, que alcanzó su mayor auge entre 1906 y 1922, año en el que fueron prohibidos los juegos de azar.

En 1884 fueron ampliadas sus dependencias con una construcción aneja, el Polisón, proyectado por Severiano Cecilia con un presupuesto de 50.000 pesetas. En sus Bajos se instaló el Restaurante Pinedo en 1949.

El acceso al que fuera lugar de encuentro de la alta sociedad burgalesa durante décadas, fue diseñado en 1904 por el arquitecto Saturnino Martínez, uno de los máximos representantes en la capital del Modernismo, movimiento artístico que recorrió Europa entre finales del siglo XIX y comienzos del siglo XX.
La puerta de entrada al Salón de Recreo, ubicada en el paseo del Espolón, es el elemento arquitectónico que mejor representa el Modernismo en la capital, por las formas redondeadas y estilizadas tanto del diseño de la puerta doble de nogal, como de los detalles de la madera, vidrios y tipografía.

Esta fachada está orientada al norte, por lo que la puerta está muy expuesta al agua y al frío del invierno burgalés y se reseca con facilidad.

A lo largo de sus 116 años de vida, el Salón de Recreo ha ocupado diversas dependencias del teatro.