Monumento proyectado en 1844, para albergar los restos de Juan Martín Díaz, el “Empecinado”. Afamado guerrillero en la lucha contra los ejércitos napoleónicos, y fiel defensor de la constitución de
Cádiz.
Su emplazamiento actual, en las inmediaciones del
arco de Fernán González y del Solar de Cid transformó la antigua colina donde había nacido la ciudad en permanente escenario de culto a la memoria de los héroes de todos los tiempos.
Fue erigido por cuestación popular en 1848.
Calle de Fernán González, 67