Y con el barreiros muy representativo de aquella época:"no tan lejana".
Me voy con el azadón en la mano, pero este sin hache.
"_Cuando a las cosas le pones el corazón, amigos mios, otro cantar te cantaría-"
Hasta para hacer las sopas de ajo.
Mañana más y mejor. Ó por lo menos lo vamos a intentar.
Me voy con el azadón en la mano, pero este sin hache.
"_Cuando a las cosas le pones el corazón, amigos mios, otro cantar te cantaría-"
Hasta para hacer las sopas de ajo.
Mañana más y mejor. Ó por lo menos lo vamos a intentar.
Saludos cordiales, Las Matas; ya veo que "a las cosas les pones el corazón", porque con esta descripción tan pormenorizada del arte de hacer queso, supongo que a más de uno le habrán dado envidia esos hermosos quesos de oveja burgaleses y querrá probar fortuna. Lo malo es que echará de menos la buena leche de aquellas ovejas churras de Burgos, el cuajo (mi abuela sólo usaba el cuajo de los corderos y dudo que conociera el cuajo industrial, si es que existía por entonces) y una buena "encella", recuérdalo bien, porque es un utensilio que ha hecho enormes méritos a lo largo de lustros y más lustros. ¿Y por qué no hacer queso casero aunque sólo sea por darse ese gustazo? Yo, hace ya unos cuantos años, hice unas hermosas morcillas de Burgos en pleno Barcelona y quienes las comieron no dijeron que estuvieran peor que las que hacen en Sotopalacios o en Cardeñadijo (por citar las más renombradas, jajaja) ¿Recuerdas cómo engordaba el cerdo (en Bustillo "el chino") con ese suero diario?
Después venía "el Chato".... No sabes tú los recuerdos que me has despertado con lo del "Chato". Pero eso lo dejo para otro día, porque no se trata de escribir ahora un libro. Tú sigue por ahí, porque algún día te pedirán que hagas de cronista del pueblo. ¡Ya decía yo que tirando del hilo....! ¡Ah! y sigue también con tu tractor porque entre surco y surco quién sabe lo que se puede encontrar ¡Suerte tienes tú! Te saluda Chindasvinto
Después venía "el Chato".... No sabes tú los recuerdos que me has despertado con lo del "Chato". Pero eso lo dejo para otro día, porque no se trata de escribir ahora un libro. Tú sigue por ahí, porque algún día te pedirán que hagas de cronista del pueblo. ¡Ya decía yo que tirando del hilo....! ¡Ah! y sigue también con tu tractor porque entre surco y surco quién sabe lo que se puede encontrar ¡Suerte tienes tú! Te saluda Chindasvinto