SORPRENDENTE
ROMÁNICO BURGALÉS
En Las Merindades, muy cerca de la orilla del
río Trema y a las afueras del
pueblo de
Butrera se alza un gran templo románico. El exterior de su cabecera concentra un sorprendente y singular repertorio iconográfico.
Su aislamiento y el bello
paisaje norteño de la Merindad de Sotoscueva que rodea la
iglesia de Nuestra Señora de Septiembre otorgan al templo de un cierto aire de misterio y evocación. Parece que fue ejecutado a lo largo del último tercio del siglo XII.
Misterio que se ve incrementado sobre todo al contemplar la singular iconografía que decora el exterior del
ábside semicircular que culmina su cabecera. Son muy llamativas las cabezas humanas —aureoladas por serpientes— embutidas en la arquivolta de la
ventana central.
También destacan por su bella factura el grifo de grandes alas abiertas, un bello
león y el hombre luchando con un ser fantástico esculpidos en los
canecillos que adornan uno de los
aleros de la cabecera.