Amigo Daniel: No te conozco, pero veo que estás enterado del pueblo de Castrecías. Es mi pueblo. Allí nací y a los 11 años salí de él. Cuando vuelvo alguna vez veo el abandono del mismo y que no tiene futuro, como dice el gran Delibes, faltan jóvenes para procrear. Un saludo desde Aviles mi pueblo adoptivo. con pujanza y vida, a pesar de la crisis.
Amigo Amador: considero que en la medida que haya temas de interés, como la despoblación y potenciales alternativas, más gente nos iremos enganchando.
Un pueblo bonito, como el tuyo y la generalidad de los pueblos de nuestra comarca, tiene grandes posibilidades de remontar el vuelo. Sus hijos, eso sí, tienen mucho que decir y animar a otros para que vayan dejando sus ideas y propuestas.
No nos dejemos arrastrar por la pereza, la incuria y el desaliento.
Un pueblo bonito, como el tuyo y la generalidad de los pueblos de nuestra comarca, tiene grandes posibilidades de remontar el vuelo. Sus hijos, eso sí, tienen mucho que decir y animar a otros para que vayan dejando sus ideas y propuestas.
No nos dejemos arrastrar por la pereza, la incuria y el desaliento.
Am igo Desiderio: Ya lo dice el gran escritor Montalbán. "La patria de cada uno es el lugar de la infancia"·Un saludo-
Estimado Amadeo: esta verdad tan contundente pasa muy despercibida, al menos en el ámbito de la coherencia, es decir, de la comprensión y del respeto a los demás. Por eso, con tanta frecuencia, nos cuesta tanto entender que la gente de las distintas regiones y de los pueblos -pequeñas o grandes naciones- se aferren a su propìo idioma (el lenguaje de la comunicación con la madre); ¿hay algo más sublime, más imperecedero?. ¿Cómo puede perseguirse o prohibirse a la gente que hable su propio idioma, el que aprendió en manos de su madre, regalado por la ternura de ésta?. Sencillamente, ese tipo de medidas, constituyen un verdadero crimen.
Muy bien Desiderio: Me ha gustado mucho tu literatura: Eres un intelectual. Gracias por contestar y un saludo.