A mi también me encanta disfrutar de estos campos.Si vas con pantalones cortos luego te salen unas buenas heridas y/o rozaduras pero da igual, es una gozada. Me encanta ir en verano a Cernégula para poder disfrutar de los campos sembrados de trigo, cebada y girasoles, y poder disfrutar de paisajes como el de la foto.