Una maravilla de
arte y aislado del suelo para su buena conservación.
La
iglesia está dedicada a
San Miguel Arcángel y es de estilo
gótico tardío, del siglo XVI, de una nave con canes lisos y dos
capillas
posteriores con
aleros moldurados. El
ábside es rectangular y la
portada tiene
arco de medio punto, bajo
pórtico abierto con gran arco rebajado. la
torre es cuadrada, maciza, con ocho huecos (algunos cegados), sin
campanas. Ahora está totalmente en
ruinas. Tenía dos
retablos: el mayor, de San Miguel, renacentista, de la
escuela de Felipe Vigarny y el otro del primer barroco burgalés, del siglo XVII, dedicado a
Cristo resucitado. Ambos recogidos en el Arzobispado de
Burgos y el primero luce ahora presidiendo restaurado la nueva iglesia de la
Parroquia de la
Santa Cruz, en Burgos.
Sus libros parroquiales dan comienzo en el año 1566.