Por Yolanda Carranza Berezo
El conjunto de
Covarrubias se localiza en la mitad meridional de la provincia de
Burgos a orilla del
río Arlanza. Tiene tres partes o
barrios. Uno, la zona antigua amurallada, que con forma arriñonada llega hasta el río. Hay dos barrios más, el llano cruzando el río y otro en la parte más alta de la ladera en torno a la
carretera. En el
casco antiguo hay varios espacios amplios o
plazas de un interés realmente destacado (plazas de Doña Sancha, Doña Urraca, Rey Chisdasvinto, Obispo Peña).
Arquitectura popular.
El entramado de madera domina en las viviendas del área, aunque siempre acompañado por algunas
casas de
piedra o barro. Sigue asentándose sobre una planta baja compuesta por
fábrica de mampostería de pequeños tamaños y de factura muy tosca, empleando pies derechos de madera para conformarla y facilitar el apoyo del entramado superior. Esta solución aquí se hace muy frecuente facilitando la constitución y protección de
esquinas y huecos, que de otra manera hubiera necesitado piezas de sillería o ladrillo para constituirlas, empleando para su formación la imperecedera y olorosa madera de sabina. La solución de vuelos pequeños y sucesivos es también frecuente, apreciándose en ellos que a menudo se arriostran, al haberse desprendido el revoco que los protegía. Generalmente, cuando en el entramado se emplea la sabina, esta no requiere cubrición, aunque a veces se haga al estar rehundida respecto al paño de la
fachada. Al contrario, cuando la madera es de menor calidad y durabilidad se recubre con el mismo revoco. Se cubrían de mortero de
barrio los adobes o pequeños tapiales para igualarlos con las piezas de entramado, como el revestimiento más tradicional. A éste se le añadía, a veces, un revoco de yeso o cal, que podría incluso tapar ya el entramado, necesitando para que agarre o bien que la madera no estuviera escuadrada, con una superficie irregular, o bien si estaba cortada y escuadrada se picaba con la azuela.
En Covarrubias también son bastante abundantes tanto los
balcones volados y protegidos por el vuelo de la cubierta, como las solanas rehundidas que no llegan a alcanzar toda la fachada. El ejemplo de la
casa del Obispo Peña, a pesar de su imagen singular como casa de época, incorpora la solana ligeramente volada de la fachada y a la vez claramente rehundida, acompañando al cuerpo volado cerrado, como elementos plenamente insertos en las tipologías tradicionales, ofreciendo un rico y variado trabajo de las cabezas de vigas y
aleros o incluso de las carreras, en un ejemplo de virtuosismo carpinteo carpintero que es extraño a la tosquedad de las construcciones más populares.
Entre los elementos singulares que integran el conjunto se encuentran la
iglesia de
San Cosme y San Damián, el
Torreón de Doña Urraca y el
edificio del Adelantamiento —todos ellos con el estatus de Bien de Interés Cultural—, además de encontrarse en la localidad otros inmuebles notables como el
rollo de justicia, el rollo-crucero en la
plaza Doña Sancha, el crucero de piedra en plaza Rodríguez de Valcárcel, la iglesia de
Santo Tomé, el antiguo
palacio de Fernán González (actual casa consistorial), el Palacio Obispo Peña, la casa de Doña Sancha y un
puente de varios ojos de piedra sobre el río Arlanza.