En este lugar justamente encima de esa pequeña finca entre las dos peñas, hará unos sesenta años comenzó a hacer un molino para moler cereal para el ganado un señor llamado Jose Borbón, este estaba de guarda del campo, se puso muy enfermo y falleció antes de terminarlo, vivía solo y tuvieron que atenderle los vecinos, aquellas cuatro paredes que hizo nos sirvieron luego a los chavales como piscina.