Entre los años 600 y 700 los nuevos pobladores godos fueron creando pequeñas aldeas: Santotis, Nestedo, San Miguel, Villaverde; Santiago, santuyán, San Pedro de Tasugueras y San Juan. A todas juntas se les llamó Val de Espina, y más adelante Val de Espinosa, por los muchos espinos que había en la zona. La llegada de los árabes a la Península tras la derrota de D. Rodrigo en la Batalla de Guadalete (año 711) supone el final del reinado visigodo y el comienzo de la conquista del territorio peninsular.