En la zona noroeste del
valle de Tobalina, en una
carretera interior que parte en
Pedrosa de Tobalina de la que lleva de Trespaderne a Bilbao por la Peña de Angulo, junto al arroyo de
Palacios, afluente del
río Jerea, y en terreno desigual, encontramos a
EXTRAMIANA, a 32 km de Villarcayo y 89 de
Burgos.
Comparte límites y compañía con Edeso,
Santa Coloma de Tobalina,
Rufrancos, Quintanilla-Montecabezas,
la Orden,
Cadiñanos y
Bascuñuelos.
Aparece como lugar de realengo, es decir, gozaba de la protección directa del rey, en las respuestas generales del Catastro del Marqués de la
Ensenada y el 25 diciembre de 1152 es la fecha en que consta escrito por primera vez su
nombre en la
historia, en la documentación del
monasterio de
San Salvador de
Oña, aunque Inocencio Cadiñanos Bardeci afirma haberlo encontrado como “Tramiana” en 1073.
Sus habitantes sumaban 116 en el año 1848, según afirma Pascual Madoz en su Diccionario geográfico. Había crecido, según la tónica de la inmensa
mayoría de los
pueblos de la provincia, en la segunda mitad del siglo XIX, presentando en 1900 un censo de 170 personas. Siguió creciendo en la dura primera mitad del siglo XX y contaba en 1950 con 223 habitantes. Pero la implacable emigración de la segunda mitad del siglo lo ha dejado reducido a 45 personas enel año 2000