El
mercado llamado azog (diario) se celebraría en la Muela, donde hoy se dice
Plaza de Granos, y el semanal de los sábados abajo, en la Plaza del Mercado. Con el tiempo se invertirían dichas celebraciones. Al año siguiente del fuero, Alfonso VIII fijaría en cierto documento los días de mercado de Oña, Pancorbo y
Frías. El gobernador puesto por el rey nombraría al merino, pero solo entre los vecinos. Será el vecindario quien elegiría a los alcaldes.