FUENTE URBEL: El segundo canecillo que llama nuestra atención es...

El segundo canecillo que llama nuestra atención es el de un desesperado lector que cubre sus ojos con una venda. Un lector imposible. Su significado es claro, no obstante, la representación del canecillo con los ojos tapados y un libro en las manos: la fe a la manera de Eriúgena y los sanjuanistas. Dios sólo puede ser conocido por la fe y la única guía que tiene la fe es la Revelación de Dios a través de la Sagrada Escritura. Es un pecado de orgullo pretender conocer a Dios a través de la razón. Ese es el pecado de Adán: el querer comer del árbol de la vida, del bien y del mal, para ser como Dios. La fe separa al creyente, que sigue el verdadero camino de Dios, del que sigue el camino que conduce al dragón, la representación del maligno. Fe de una manera determinada es la que conduce hacia el No-Ser de Dios del que habla Eriúgena.

Esta es la foto por la que me fui este verano al pueblo, y que tome subido en la escalera que nos había prestado Aureliano, porque teníamos la duda en otra que estaba tomada desde abajo, si el personaje tenia los ojos vendados o no ¿tiene una venda?
Ahora un día de estos de otoño, me voy a ir con mi primo Rafa Celis, a hacer una de la Mata desde la Rad, y otra desde el Gustar y otra... y otra... luego vamos a comernos un revuelto de setas de “carrerilla” a Montorio y de regreso, compraremos unas morcillas y una sarta de chorizo picante (riquísimo) en Sotopalacios.
Saludos