Estado de conservación:
El estado de la
iglesia actualmente es de semirruina, tras más de 15 años de abandono. Existen al menos dos importantes grietas en el
ábside que van desde el
tejado al suelo, lo mismo ocurre en la
torre. El tejado está prácticamente hundido, las vigas apoyan directamente en las
bóvedas trasladando su peso y empuje a los muros y en su interior hay desprendimientos de los nervios de las bóvedas y grandes superficies verdes de humedad con vegetación.
Riesgo de derrumbe.
De continuar el deterioro progresivo del templo su derribo sería inminente, si no se detiene ya y se apuntala, tal y como han certificado los técnicos.