Día 30-3-2006
Este
pueblo es un lugar de reposo interior. A ello nos lleva la alegre
campana del
Convento que nos anuncia sus rezos diarios: matutinos y
nocturnos. Alrededor de los
claustros, se goza de tranquilidad, silencio, paz y sosiego. Se respiran aires fraternos entre las monjas del Cister.
Se puede observar su
claustro románico donde se contempla la decoración vegetal en sus
capiteles. Quien se anime a visitarlo, podrá disfrutar de todo, a través de comentarios más detallados.
Una
... (ver texto completo)