Buenas tardes Lucía,
Feliz día de Navidad para tí también.
¡Claro que no me has aburrido, todo lo contrario!. En todo caso muy contenta de que te dirijas a mí.
Yo no soy de Gredilla. Nací en Madrid. Lo era mi padre, mis abuelos y quizá mi bisabuela?, no sé. Pero de todas formas me hincho de orgullo cuando veo las fotos y lo bonito que es este pueblo y lo bien cuidado que lo tienen, igual o más que si fuera de allí. Tengo un fuerte vínculo afectivo con Gredilla a pesar de que la vida haya discurrido por otros derroteros. Es más, en el trabajo todo el mundo piensa que yo soy de Burgos.
En el pueblo no tengo nada, salvo un pequeño trozo de terreno que compraron mis padres con toda la ilusión del mundo para construirse una casita de vacaciones cuando él se jubiló, pero con el tiempo se frustraron sus sueños y finalmente se la compraron en la playa. En la costa no se lo pasaron mal, pero siempre añoraron mucho Gredilla. Sin duda hubieran sido mucho más felices. Ellos eran más de “interior”.
El caso es que poco antes del verano, aprovechando una baja, empecé un “mini árbol genealógico para mis hijos y me puse a bucear en Internet buscando información de los pueblos de mis padres y abuelos y entonces fue cuando vi una foto de unos niños en Gredilla de, más o menos mediados de los 60. ¡Me dio un vuelco el corazón!. Tardaron tres días en autorizarme a entrar en el foro y me parecieron tres años de lo impaciente que estaba.
A partir de ese momento aquí vengo de vez en cuando, de convidada de piedra. Me han aceptado con afecto y tolerancia y yo se lo agradezco mucho…
La vida da tantas vueltas que ¿Quién me dice a mí que algún día no pueda cumplir el sueño de mis padres?... En fín, será la Navidad que nos pone muy sentimentales.
Recibe Lucía, un afectuoso saludo y mis mejores deseos para estos días de Adviento y para el Nuevo Año que se avecina.
Un abrazo,
Marisol
Feliz día de Navidad para tí también.
¡Claro que no me has aburrido, todo lo contrario!. En todo caso muy contenta de que te dirijas a mí.
Yo no soy de Gredilla. Nací en Madrid. Lo era mi padre, mis abuelos y quizá mi bisabuela?, no sé. Pero de todas formas me hincho de orgullo cuando veo las fotos y lo bonito que es este pueblo y lo bien cuidado que lo tienen, igual o más que si fuera de allí. Tengo un fuerte vínculo afectivo con Gredilla a pesar de que la vida haya discurrido por otros derroteros. Es más, en el trabajo todo el mundo piensa que yo soy de Burgos.
En el pueblo no tengo nada, salvo un pequeño trozo de terreno que compraron mis padres con toda la ilusión del mundo para construirse una casita de vacaciones cuando él se jubiló, pero con el tiempo se frustraron sus sueños y finalmente se la compraron en la playa. En la costa no se lo pasaron mal, pero siempre añoraron mucho Gredilla. Sin duda hubieran sido mucho más felices. Ellos eran más de “interior”.
El caso es que poco antes del verano, aprovechando una baja, empecé un “mini árbol genealógico para mis hijos y me puse a bucear en Internet buscando información de los pueblos de mis padres y abuelos y entonces fue cuando vi una foto de unos niños en Gredilla de, más o menos mediados de los 60. ¡Me dio un vuelco el corazón!. Tardaron tres días en autorizarme a entrar en el foro y me parecieron tres años de lo impaciente que estaba.
A partir de ese momento aquí vengo de vez en cuando, de convidada de piedra. Me han aceptado con afecto y tolerancia y yo se lo agradezco mucho…
La vida da tantas vueltas que ¿Quién me dice a mí que algún día no pueda cumplir el sueño de mis padres?... En fín, será la Navidad que nos pone muy sentimentales.
Recibe Lucía, un afectuoso saludo y mis mejores deseos para estos días de Adviento y para el Nuevo Año que se avecina.
Un abrazo,
Marisol