Y sus habitantes eligieron lo mejor para demostrar su fe y se dotaron de una magnífica
iglesia, dedicada a
Santa María, con tres amplias naves, coronadas con
bóvedas de crucería tardogóticas, con
capiteles corridos. El
ábside es poligonal con
ventanales laterales y contrafuertes. Tiene al pie de la
torre una
portada gótica tapiada y otra
románica de transición, pero lo que llama poderosamente la atención es su portada principal, abierta en el lado sur de la iglesia, magnífico conjunto clasicista, realizado por Bartolomé de Herrera y Pedro Díaz
Palacios en 1627, a modo de
retablo, con
columnas estriadas, y
hornacinas vacías, relieves de la Asunción, Coronación y Evangelistas y
frontón partido con remate de pináculos y
cruz, enmarcando una alta
puerta adintelada, a la que se llega por una majestuosa escalinata. La torre es cuadrada, más antigua, con huecos a modo de almenas, crestería, pináculos góticos, con cuatro huecos, dos
campanas y dos campanillos. La
pila es gótica, buena, con
arcos trilobulados, apostolado y decoración va-riada. Y el retablo mayor es, sin duda, lo mejor de la iglesia; es una magnífica obra gótica en torno a 1500, con cinco
calles, dos entrecalles y cuatro cuerpos de excelente imaginería y relieves bajo doseletes calados y coronada por un no menos magnífico
Calvario. También los otros
retablos son buenos. Hay
escudos de los Girón y Mendoza, señores del lugar y de los obispos de Osma, a cuya diócesis pertenecía. Toda la Iglesia es B. I. C. y tiene un pequeño
museo, pero con piezas de gran mérito, entre las que sobresalen algunos restos románicos, fustes y capiteles, de discípulos de segundo artista de Silos, procedentes del desaparecido
monasterio de
San Pedro. O la imagen del
Santo Cristo del desaparecido
pueblo de Reveche, románica de principios del siglo XIII, cuya iglesia-
ermita se conser-va, aunque ya en terreno de
Oquillas.
Sus libros parroquiales dan comienzo en 1565.
Hay noticias de que tuvo recinto
amurallado,
castillo y tres
monasterios: el ya citado de San Pedro, cisterciense, con interesantes restos y sepulcros e
historia, que se vendió en 1822 tras la desamortización; otro dedicado a San Lorenzo y otro a Santa Eugenia. Tiene una ermita dedicada a la
Virgen del
Río, junto a la que hay un hermoso crucero barroco. Se cree que es la cuna de Per Abat, manuscriptor del Cantar de Mío Cid.
En 1534 nace el padre Antonio de
Torres, jesuita, con diversos cargos en la Compañía, también misionero en América. De gran oración y mortificación. Escritor.
En 1553 comienza sus días el padre Juan de Salas, jesuita, profesor de Filosofía y Teología, en las más grandes Universidades, también en Roma. Escritor.
A finales del siglo XVII ve la luz el padre Miguel Jiménez Barranco, benedictino, Predicador General de la Orden y abad de Valvanera, Rivas del Sil y San Salvador Cornelianense. De gran reputación como erudito teólogo. Escritor.
En 1774 viene a la vida el padre José Villanueva, agustino, misionero en Filipinas y, sobre todo, con grandes méritos en China, donde murió. Escritor.
El 25 enero 1848 nace Pablo Gómez Jalón,
abogado y juez. Escritor.
Hacia 1850 nace Valentín Jalón Gallo, Licenciado en Derecho, ligado al Círculo Católico de Obreros. Fundó con Petronila Casado y el padre Salaverri la Caja de Ahorros del Círculo Católico. La ciudad le ha dedicado una
calle.
El 20 enero 1903 ve de la luz Sebastián Calvo Martínez, claretiano, martirizado en Barbastro (
Huesca) el 12 agosto 1936 y beatificado el 25 octubre 1992.
En diciembre de 1915, descendiente de
familias relacionadas con el mundo de la
farmacia, comienza sus días Siro Arribas Jimeno, Doctor en Ciencias Químicas, catedrático de la Universidad de Oviedo, con importantes cargos, participa en política, y está en posesión de diversas condecoraciones. Escritor.
En febrero de 1942 viene a la vida Pedro Ontoria Oquillas, Licenciado en Teología y Filosofía y Letras, también maestro, profesor, investigador, colaborador en prensa. Escritor, que llega a afirmar que en el monasterio de San Pedro de Gumiel estuvieron enterrados Alvar Fáñez y Pedro Bermúdez, sobrinos del Cid.
Su folclore se manifiesta de modo especial a través de las
danzas populares, entre las que sobresale “La Jaula”.
Y en sus tierras están catalogados un yacimiento arqueológico del Neolítico, tres
Romanos y 13 de época sin determinar. Hay, además, uno posiblemente de la Cultura Campaniforme, uno posible de la Edad del Bronce (en el Museo Provincial hay dos hachas procedentes de aquí), tres posiblemente
Medievales y otro también de época sin determinar (
puente de Revilla).
Sin duda pasaba por sus tierras la calzada
romana “Ab Astúrica per Cantabriam Caesaraugustam”; hay restos y dos
puentes y tenía como puntos cercanos Rauda (Roa) y Clunia.