El mayor atractivo turístico y científico de la villa de Hacinas son los árboles fósiles. Los primeros restos aparecieron en los años cuarenta del siglo XIX, enterrados y rodeados de material fluvial. El primer árbol fósil se trasladó a la localidad en el año 1976 y quedó expuesto al público. Más tarde se trasladaron otros y en la actualidad, se exponen en Hacinas tres árboles fósiles. Además de éstos, existen al menos otros siete enterrados. Desde finales de enero de 2009 se encuentra abierto al público el Centro de Visitantes del Árbol Fósil, en el que el visitante puede contemplar la reconstrucción del ambiente primitivo de hace 120 millones de años, fósiles vegetales de distintas épocas geológicas, informaciones sobre los bosques fósiles en España o los más famosos bosques petrificados en el mundo. Todo esto convierte a Hacinas en uno de los mejores pueblos de la Sierra de la Demanda.