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Casas, la una habitable con una parra, la otra parece abandonada, HEDESO

Hedeso también conocido como Edeso, es una pequeña localidad del municipio burgalés de Valle de Tobalina, situado al norte del valle, en una altura, en el interfluvio formado por dos arroyos subsidiarios del arroyo de La Prada por su margen izquierda, en la comarca de Las Merindades.
Se trata de un pueblecito cuyas construcciones se disponen de forma dispersa en dirección norte-sur, formando dos caseríos. Actualmente su pequeño casco urbano cuenta con varias casas solariegas construidas en los siglos XIX y XX, realizadas con estructura de madera y mampostería de arenisca y sillares en las esquinas, generalmente de dos o tres plantas, con la balconada o solana de madera en la última planta y orientada al naciente o mediodía. Existen algunas edificaciones auxiliares con finalidades agropecuarias. La gran mayoría de estas casas y sus respectivas construcciones auxiliares se encuentran derruidas o en avanzado estado de deterioro.
Existe un segundo y reducido grupo de casas de tradición norteña formado por aquellas con reformas recientes, si bien dichas reformas no han alterado su morfología tradicional. Estas casas son habitadas ocasionalmente.
La iglesia está dedicada a Santiago Apóstol, de pequeñas proporciones, de una nave con ábside es rectangular, portada sencilla con arco de medio punto con impostas y grandes dovelas y la torre es en espadaña con una cornisa y remate de pináculos y cruz y dos huecos que tenían dos campanas que fueron robadas.
Unos emprendedores holandeses con su casa de turismo rural “La Sonrisa”, han convertido este rincón en destino de centenares viajeros de toda Europa. Hedeso y la comarca representan a esa parte de la provincia que conserva el sabor, donde el silencio y la belleza son regalos diarios de la naturaleza.