Gracias a generosas personas como Cándido Neila, el conjunto histórico y arqueológico de la iglesia parroquial, no se desmorona. Se están reparando las grietas del ábside, el muro de contención que se añadió y las grietas del ábside. Se trabaja con mortero de cal hidráulica, (prohibido el cemento portland), y pernos de acero inoxidable para el cosido en el exterior de los paños. En el interior se está empleando yeso, que aunque está ya fraguado se debe secar bien para dar la pintura. No existe proyecto ... (ver texto completo)