Los Reyes mágicos nos han traído el mejor regalo: lluvia suave y blanca nieve.
Recarga para pozos y acuíferos, humedad para las siembras y caudales altos, para los ríos.
Todo un espléndido regalo para los labradores, ganaderos y hortelanos.
Los mares se han subido a las nubes para regurgitar hectómetros cúbicos de agua y saciar la sed de la tierra y sus inquilinos todos.
Pantanos llenos, simas llenas, lagos rebosantes, y por las montañas bajando los torrentes
Recarga para pozos y acuíferos, humedad para las siembras y caudales altos, para los ríos.
Todo un espléndido regalo para los labradores, ganaderos y hortelanos.
Los mares se han subido a las nubes para regurgitar hectómetros cúbicos de agua y saciar la sed de la tierra y sus inquilinos todos.
Pantanos llenos, simas llenas, lagos rebosantes, y por las montañas bajando los torrentes