Los árboles a parte de dar frutos y semillas, embellecen los pueblos y crean paisaje. Definir paisaje es tan amplio que abarcaría,
esencialmente, que gracias a los árboles, tenemos el oxigeno necesario para poder seguir existiendo.
Confío que este vecino, vuelva a plantar en el mismo sitio otra variedad que le dé más frutos. Y así las calles sigan estando bonitas.
A mi me produce una gran satisfacción el plantar árboles, que a veces más bien diría que es una adicción. Y no sólo planto arboles... Este hermoso guindo ya no existe. Como no daba casi fruto fue "castigado" con la motosierra y serrado por el tronco.
¡Qué lástima! Su bella estampa, florida en primavera, era preciosa.
Era como un centinela en medio del asfalto y del cemento de la calle.
Como tantas cosas del pueblo, ya vo volverá a ser lo mismo.
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