Cierto que es la cara norte de la iglesia, pero con los arboles que ocultan el bosque queda un poco desdibujada la perspectiva del monumento religioso.
Hay que reconocer lo bien que está elegido el lugar y la firmeza de la construcción, han pasado 700 años y la iglesia sigue casi igual. Aquella gente, sí que sabia construir edificios robustos, útiles y bellos.
Es una pena que no se use más este edificio, solo para la misa de los domingos en verano. Hay que reconocer que a parte de las personas es lo mejor que hay en Hermosilla. Saludos amigos, "gatos".
Hay que reconocer lo bien que está elegido el lugar y la firmeza de la construcción, han pasado 700 años y la iglesia sigue casi igual. Aquella gente, sí que sabia construir edificios robustos, útiles y bellos.
Es una pena que no se use más este edificio, solo para la misa de los domingos en verano. Hay que reconocer que a parte de las personas es lo mejor que hay en Hermosilla. Saludos amigos, "gatos".