Gracias a los girasoles, plantas heliotropicas, (giran buscando la luz solar), las muchas colmenas instaladas en el paraje de Romadero pueden libar el dulce néctar de sus flores y hacer que con su ir y venir de unas plantas a otras polinizar cuanta flor y floración encuentren en sus recorridos, colaborando en la producción de más frutos y semillas por los campos hermosillanos; y haciendo más rico y variado el paisaje.
Por todo ello, mi agradecimiento a la propietari@ de las colmenas y al agricultor que ha colaborado dejando su parcela, para colocar los enjambres. Con pequeños buenos detalles, igual, a grandes beneficios.
Por todo ello, mi agradecimiento a la propietari@ de las colmenas y al agricultor que ha colaborado dejando su parcela, para colocar los enjambres. Con pequeños buenos detalles, igual, a grandes beneficios.