Luz ahora: 0,10100 €/kWh

HERMOSILLA: ... Dice el árbol:...

Jerbal o Serbo o serbal con sus frutos marrones como pasados, de un sabor único, especial. Muy semejante al nispero europeo en presencia y sabor.

Ciertamente es un arbol que apenas se planta. No es fácil transportar sus frutos y menos aún personas que los compren.

Además tardan mucho en dar las gerbas 10 o 12 años y su recolección es difícil.

Este árbol da un fruto, la jerba, que tiene un sabor especial. A la vista, cuando está maduro, no es muy agradecido ya que parece que se ha podrido por su color marrón ocurso.

A mí me gustaba mucho, aunque nunca he visto este fruto a la venta en las fruterías de ninguna ciudad o pueblo.

Siempre recuerdo que había algún jerbo en La Vercilla, en el camino a La Lámpara, en la carretera de Llano cerca de Rondalonso, en la carretera / camino de la parcelaria a Poza junto a Las Coronillas,... alguno de ellos, ¡aún sobreviven!

¡Qué tiempos aquellos en que ibas por el campo a finales de verano y principios de otoño y te encontrabas casi de todos los frutos para catar!

Hoy solo quedan campos de rastrojos y de girasoles.

Dice el gerbo: yo soy tu amigo por favor no me hagas daño, mas si es necesario sea, pero solo si es necesario.

Estoy para darte frutos,
Tal vez solamente pájaros,
Sombra si la necesitas,
Rumor si te gusta el cántico.

Algún día podré ser la ventana de tu cuarto.
La mesa para tu pan, tu mecedora, tu arado, la ayuda de tu jornal o el lecho de tu descanso.

Y aunque sea triste tener que recordartelo... el último compañero que te llevará en sus brazos.

Y te digo: por favor no me hagas daño, mas si es necesario sea, pero sólo el necesario.

... Dice el árbol:

siendo más fuerte que tú (incluso llego a ser centenario o milenario), y en completo desamparo temo, a los fríos del invierno y a las llamas del verano.

Si me ofendes, no te daño. Al contrario. Cuantas veces y eso que lo diga el sándalo. El cuchillo que me hiere lo devuelvo perfumado.

Pero el daño que me haces sin causa. Ése sí que me hace daño!

Yo soy tu amigo y te digo: por favor, no me hagas daño. Mas si es necesario sea, pero sólo el necesario".