Hontanas, declarado Bien de Interés Cultural con la categoría de Conjunto Histórico
Artístico en 1999, esconde entre sus
calles una cuidada
arquitectura castellana con tintes
medievales que hacen de ella una de las más bellas y pintorescas villas de todo el
camino de Santiago. Se encuentra en la provincia de
Burgos, en la comarca de Odra-Pisuerga. Desde 2015 su
centro histórico está incluido en el Plan Especial de Protección del Conjunto Histórico del Camino de Santiago (PEPCH).
Villa de numerosas
fuentes (de ahí la etimología de su nombre, "fontanas"), en su casco histórico podemos encontrar numerosos
edificios reseñables. La
iglesia parroquial de Hontanas está dedicada a la Inmaculada Concepción. Fue construida primitivamente en estilo
gótico en el siglo XIV, aunque reformada neoclásicamente con el paso del tiempo. De su estructura destaca una gran
torre con una
cúpula de media naranja. Junto a la iglesia se encontraba el
Palacio de Prelado Burgalés, al que Hontanas perteneció desde 1208, conservándose hoy en día un
arco gótico. En la
plaza de la villa anexa a la iglesia encontramos lo que en el
medievo fue una torre de carácter defensivo construida en el siglo XII - XIII. En la actualidad se accede a ella desde el interior de la iglesia por un arco
románico. Aún conserva varias saeteras, una
ventana de estilo románico que comunica con la iglesia y restos de una bonita
bóveda de aristas, de la cual nace una
escalera de caracol para acceder a la torre. Estas estructuras se han descubierto recientemente gracias a un proyecto en el que se están eliminando la cal y el yeso de las paredes que, según cuentan los ancianos del lugar, se dio para desinfectarlas de las pestes de la época. En este espacio se realizan
exposiciones temporales que intentan promocionar la cultura de la comarca, así como exposiciones artísticas.
El
Hospital de
San Juan, se conserva como vestigio jacobeo, también llamado "
Mesón de los Franceses". Es un antiguo hospital
medieval levantado en los siglos XIII-XIV. Conserva en su interior un arco gótico que formaba parte de la
fachada del antiguo hospital. Hoy está perfectamente restaurado y habilitado como
albergue municipal de peregrinos.
También encontramos en la plaza del
pueblo la
Fuente de la Estrella, de
piedra tallada con un copete de medio punto y una estrella de seis puntas en relieve. En el frontal dos
caños simétricos compiten al unísono surtiendo de abundante y fresca
agua al caminante. Atravesando el callejón de la antigua cárcel, llegamos al rehabilitado
patio del cura, que a día de hoy alberga un lugar de recreo infantil.
Fuera del núcleo urbano podemos disfrutar de dos
miradores, dos
ermitas, un
torreón y de sus numerosas fuentes, como la fuente del
caño gordo, el
pilón nuevo, donde los cansados peregrinos relajan sus fatigadas piernas con un remojón, o el pilón viejo, recientemente restaurado y que alegra la
calle por la que discurre aumentando la
fauna con pajarillos que se acercan a calmar su sed.
Hontanas es un pueblo muy activo, en gran parte gracias a su pertenencia a la ruta Medieval Jacobea. Desde primera hora de la mañana los peregrinos inundan sus calles, realizando un alto en el camino para disfrutar de sus numerosas fuentes, pero también haciendo de Hontanas su hogar por un día (o alguno más, dependiendo del nivel de cansancio), donde se encuentran con otros caminantes, disfrutan de su gastronomía, sus
piscinas municipales y descansan las fatigas del camino.
Los habitantes de Hontanas son personas cálidas, cercanas y hospitalarias dispuestas a entablar conversación con cualquier caminante o forastero que se encuentre en sus calles. Este carácter abierto se debe sin duda a su pertenencia al Camino de Santiago. Su vocación hospitalaria se refleja también en el entramado de edificios. Podemos encontrar 5
albergues de peregrinos, un
hotel rural y unas piscinas municipales. Actualmente se está construyendo un spa en el que se podrá disfrutar la preciada agua de este pueblo de una manera diferente.
Comprometidos con la conservación del medio ambiente, sus habitantes realizan diferentes campañas de reforestación a lo largo del año.
Existen numerosas
tradiciones que se siguen manteniendo con mimo. La
hoguera en honor a San Roque, en la que los mozos del pueblo parten en busca de olmos secos para hacer una gran hoguera agradeciendo al
santo que la fiebre tifoidea pasó de largo. Y la
procesión en honor a San Isidro, donde la asociación de agricultores obsequia con un lunch a todo el que se quiera acercar. Durante la
Semana Santa se coloca un
monumento en la iglesia.
Hontanas es un pueblo de gran
tradición castellana, sus habitantes se dedican a la
agricultura,
ganadería y el cuidado del peregrino. Podemos degustar
cocidos y sopas, lechazo asado nacido en la villa y todos los productos del
cerdo que podamos imaginar, ya que al realizar la
matanza se suele obsequiar a los vecinos con morcilla, chorizo y algo de caldo mondongo. Los peregrinos pueden disfrutar del tradicional menú del peregrino o de diferentes
paellas.
Hontanas es sin duda un pueblo bello. Lo es por fuera, con su arquitectura,
flora y fauna; pero sobre todo por dentro por su cultura, tradiciones,
historia, gastronomía y hospitalidad de sus gentes, que día a día luchan para que esta pequeña villa sea un ejemplo a seguir dentro de la
España vaciada.