En este día feliz de la Pascua, los cristianos estamos de fiesta porque –como afirmaba Odo Casel, liturgista alemán –“la Pascua es la fiesta de las fiestas, la fiesta más grande”. La resurrección del Señor ocurre en “la hora” esperada, temida y ansiada por Jesús, es el acontecimiento liberador, cuando el grano de trigo evangélico, renacido de la muerte y sepultura, da fruto abundante y se convierte en el pan vivo de la comunidad. Toda la vida de Jesús –tejida de gestos salvadores- culmina plenamente ... (ver texto completo)