Nos produce mucha alegría cuando vemos el levantamiento
de un nuevo Hogar en nuestro pueblo, ya que desgraciadamente
la población mengua insesantemente. Ello se debe a que
personas nacidas en nuestro lugar, a pesar de residir
habitualmente en las ciudades, no deja perder el cariño
hacía su tierra. ¡Bienvenido sea esta casa!