Que bonito, seria estar por esos lares, con amiguitos/as. cuando, ni; a, yo tenia, dos amigitos, uno, es como mi hermano, vive en La Florida, el otro que era siempre el mandadero, chofer, etc, era grande y, mayor, pero, pobrecito, hacia todo, lo que mi unica amiguita y yo le deciamos, asi era de bueno. Contaba yo con tres amiguitas, una real y otras imaginarias. Marilia y cotilia, nombres que yo cree, no habia nadie que se llamara ni parecido, era feliz, marc pero nada de rio ni de campos ni grupos,... Buenos días Javier. Me gusta verte por ésta web, y que vuelvas a recorrer y recordar alguno de tus días de infancia. Fue una pena el que yo partiese el día que tu te encontrabas
por ahí. Espero que habrá otro día en que podamos recorrer juntos, con nuestras bicis, este pequeño tramo y charlar largamente sobre nuestros recuerdos. Un abrazo. Buenos días.
Paso por aquí para dar la bienvenida a Marcelino ya situado en "su" oficina principal y, escojo esa foto de Arlanza, recordando aquellos días de niño en los cuales íbamos en cuadrilla (chicos y chicas, creo que hasta con nuestro bocata, que podría consistir en un corrusco de hogaza y dos onzas de chocolate). La primera vez me causó impresión ver en el suelo de la nave principal diversas lápidas aún sin esquilmar (1956-58).
Pasadlo muy bien.
Saludos. ¡Cuántas Oraciones habrán recogido estas piedras piadosas, ahora con aspecto de difunto!