la
Fragua en otros tiempos pasados fué un importante lugar de trabajo para el arreglo de
aperos de la
labranza,
rejas, verjas, cerraduras, clavos, ballestas, entre otras eran puestas a punto para su uso. Además de los hombres que acompañaban ayudando al herrero, siempre había otros varios espectadores más, conversando todos sobre los más diversos temas de la vida. La mujeres hacían esto en los
lavaderos públicos. En la imagen podemos apreciar en el centro el yunque, que era como su mesa de trabajo, sus aliados y herramientas principales eran: el fuego para calentar
el hierro, el
agua para forjar y dar temple al hierro; los martillos y tenazas servian para golpear y agarrar respectovamente los hierros a tratar. Iba el Sr Herreo con grueso delantal de cuero para protegerse de las chispas incandescentes que salian como centellas al ser golpeado el metal. Yo tuve el privilegio de contemplarlo de niño y para mi era un espectáculo maravilloso. De las dos que teniamos, una ha desaparecido totalmente y la otra queda solo el
edificio modificado.