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un Testigo olvidado, HORTIGUELA

ya os dije en alguna ocasión que en nuestro pueblo en los años 40-50 existian varios pequeños edificios que eran cocederos particulares donde un número reducido de familias cocian periodicamente su pan. Pues bien, a dia de hoy han desaparecido todos menos este viejo y casi abandonadfo edificio que da fé de una especie casi extinta. Se halla situado al costado de la Fuente Romana El olor a harina fresca y su oroma en la cocción dejaba, a unos cuantos metros de su lugar una estela deliciosa. Los panes que normalmente se hacian eran las llamadas Hogazas, cuyo peso, más o menos, era de proximo a los dos kilos.
Para evitar que el tiempo transcurrido de una hornada a otra endureciese mucho el pan se solía intercambiar con otras familias para de esta forma sencilla salir ganando todos.
(27 de Septiembre de 2011)
Aquellas rebanadas de pan recién cocido, en el que se había depositado una capita de azúcar ¡y mojado con vino de la propia cosecha tenían un sabor inigualable, y si se utilizaban para "mojar" en los huevos fritos ya era un auténtico manjar. ¡Tal vez en el futuro, se vuelva a buscar con ahínco aquellos sabores perdidos!.
Este sera un comentario, retrogado, pero, mi humilde opinion es que a la par del gran desarrollo cientifico, tecnico, todos tenemos quejas, de productos que consumiamoos todosy valga la redundancia, y que ahora dejan mucho que desear, El pan nuestro de cada dia alimento principal de los hogares mas humildes comido con el mayor respeto
al que no se debia tirar al piso, o alos animales antes de besarlo, que en la madrugada hacia sentir ese olor delicioso, que algunos esperaban en las noches para comerlo...