Hasta los años setenta del pasado siglo no llegó el
agua corriente a nuestro
pueblo. Hasta entonces era muy popular el ir a buscarla a la
fuente pública. Esta era un foco de convivencia humana en donde se juntaban las mozas que iban a buscarla con su cántaro, con los mozos que llegaban del
campo con la yunta y abrevaban los animales en el
pilón anexo a la fuente.