Son de las aves más bonitas que tenemos. Les encanta comerse las abejas, por ello no son queridos
por los mieleros. Vuelan muy alto, y son un poco difíciles de observar. Sus
nidos los hacen en terraplenes
a las orillas de los
ríos. Nosotros los tenemos desde hace muchas décadas que yo sepa. Tienes un canto especial
que yo soy capaz de distinguirlos aun sin verlos. Vuelan siempre en pequeños grupos. Rodriguez de la
Fuente, el naturalista que te mencionaba antes también tiene un capítulo de su famosa
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