La
iglesia de
San Clemente es una antigua iglesia situada en
Huidobro en la que se manifiesta ricamente el estilo decorativo del
románico burgalés. Se trata de un templo del siglo XII edificado con sillería caliza y planta original
románica, con nave única dividida y
ábside semicircular, a la que se añadieron quizá en el siglo XVI, dos
capillas prismáticas perpendiculares formando una
cruz griega, y una
torre a occidente con husillo de acceso.
La
portada es tardogótica, de medio punto, con cuatro arquivoltas labradas con motivos ornamentales y apoyadas sobre
capiteles igualmente decorados. El ábside está dividido en tres
calles por dos semicolumnas. En el segmento central se abre una
ventana abocinada con guardapolvos ajedrezado y dos arquivoltas, estilo que se repite en otras
ventanas. Destaca el excelente trabajo escultórico de los maestros canteros en capiteles y
canecillo, que representan a sirenas, grifos, arpías, cabezas masculinas, mascarones, rabelistas, acróbatas, etcétera.
Del mobiliario interior sólo se conserva un hermoso
retablo de madera policromada, con tres calles y la efigie del papa Clemente en el encasamento central. Fue trasladado al
Museo del Retablo de
Burgos.
En 2013 la asociación
Amigos del Románico se dispuso a solicitar la inclusión de esta templo en el catálogo de Bienes de Interés Cultural, tras comprobar el estado de
ruina progresiva en la que se encontraba el
edificio y que hacía peligrar el ábside, uno de los elementos más valiosos de San Clemente. En palabras del historiador José Manuel Rodríguez Montañés.