ESCONDITE
Se decía también esconderite. El grupo que determinaba jugar al escondite sorteaba quién "se la quedaba". Es decir, quién debía comenzar el juego quedándose en un punto convenido (una pared). El elegido se volvía de cara a la pared y contaba en voz alta hasta una cifra convenida. Mientras tanto sus compañeros se habían escondido donde habían podido. Al acabar de contar, el que "se la había quedado", se volvía y advertía:"el que no se haya escondido tiempo ha tenido"... Y comenzaba la búsqueda. Cuando descubría a alguno debía correr hata el punto y decir:"por fulano, que está en tal sitio"... Y el descubierto tenía la obligación de ir a la "casa" y permanecer preso. O, si la situación lo permitía, correr más que quien lo había descubierto y llegar antes que él a poner la mano en la pared y entonces quedaba libre y, si en la "casa" había ya algún cautivo, también resultaba libre.
Se decía también esconderite. El grupo que determinaba jugar al escondite sorteaba quién "se la quedaba". Es decir, quién debía comenzar el juego quedándose en un punto convenido (una pared). El elegido se volvía de cara a la pared y contaba en voz alta hasta una cifra convenida. Mientras tanto sus compañeros se habían escondido donde habían podido. Al acabar de contar, el que "se la había quedado", se volvía y advertía:"el que no se haya escondido tiempo ha tenido"... Y comenzaba la búsqueda. Cuando descubría a alguno debía correr hata el punto y decir:"por fulano, que está en tal sitio"... Y el descubierto tenía la obligación de ir a la "casa" y permanecer preso. O, si la situación lo permitía, correr más que quien lo había descubierto y llegar antes que él a poner la mano en la pared y entonces quedaba libre y, si en la "casa" había ya algún cautivo, también resultaba libre.