Hola Victoria: Esta mañana me he puesto a colgar un cuadro y en un descuido se ma ha caído y se ha roto el cristal. La mujer no me ha regañado; pero no le ha sabido nada bueno. Entonces he cogido y me he ido a ver la ciudad y he visto una gran luna rota, de uno de los mejores comercios. Y he pensado: Bueno también por la calle existen manirrotos como yo. Ya no soy el único...
Un abrazo.
Un abrazo.