LA MEJOR DE LAS POESÍAS
El alba me despertó con los ojos cerrados.
El cielo se engalanaba con un nuevo día;
me lo comentaba el canto de una alondra
y frescor de la luna empañada de la ventana.
Pensé en escribir unas líneas de versos
donde plasmara ese tiempo sin reloj.
Tu, dormida, me abrazabas, enredadas las piernas.
Tu rostro sobre mi hombro y tu boca cerrada en mí
donde recibía tu acompasada y cálida respiración.
No era momento, no entraba mi inspiración.
Estabas vestida solo con tu piel de leche...
¡De pronto un beso se posó en mi hombro!
No necesitaba imágenes para los versos
Estaba viviendo la mejor de las poesías.
Jonas Diego Villarrubia
El alba me despertó con los ojos cerrados.
El cielo se engalanaba con un nuevo día;
me lo comentaba el canto de una alondra
y frescor de la luna empañada de la ventana.
Pensé en escribir unas líneas de versos
donde plasmara ese tiempo sin reloj.
Tu, dormida, me abrazabas, enredadas las piernas.
Tu rostro sobre mi hombro y tu boca cerrada en mí
donde recibía tu acompasada y cálida respiración.
No era momento, no entraba mi inspiración.
Estabas vestida solo con tu piel de leche...
¡De pronto un beso se posó en mi hombro!
No necesitaba imágenes para los versos
Estaba viviendo la mejor de las poesías.
Jonas Diego Villarrubia