EL QUE QUIERE LA ROSA, AUNQUE LE PINCHE, NO SE ENOJA.
Señala que cuando se consigue algo, se menosprecian las dificultades encontradas en el camino. En ocasiones alude a la galantería o al cortejo, y los "pinchazos" de las espinas serían los desdenes de la dama, poco importantes si se consigue su amor
Señala que cuando se consigue algo, se menosprecian las dificultades encontradas en el camino. En ocasiones alude a la galantería o al cortejo, y los "pinchazos" de las espinas serían los desdenes de la dama, poco importantes si se consigue su amor